Formar usuarios en competencias informáticas e informacionales para hacerlos "legalizados digitales": un deber de las bibliotecas en el siglo XXI

Desde hace varios años se han utilizado los términos, nativos digitales, e, inmigrantes digitales, para referirse a las personas que por contexto y familiaridad con el uso de las tecnologías de la información y la comunicación, TIC, tienen más o menos experticia en su utilización. Asumiendo esta categorización, un deber de las bibliotecas es generar programas de formación que faciliten la adquisición de las competencias informáticas e informacionales, cl2, especialmente a los diferentes grupos de usuarios que podrían caracterizarse como, inmigrantes digitales, con el objetivo que los mismos, gracias a esa capacitación continua y de acuerdo a sus necesidades y potencialidades, se conviertan en, legalizados digitales, es decir, en personas, generalmente adultas o adultas mayores, que aunque no nacieron y crecieron con las TIC, actualmente están capacitadas, gracias a esos procesos de formación, tanto para un uso eficaz y eficiente de las TIC, competencias informáticas, como para una adecuada gestión de la información relacionada con aspectos de interés personal y familiar como con aspectos profesionales y laborales, competencias informacionales, Este artículo presenta una reflexión sobre estas categorías, determinadas orientaciones sobre esta formación y algunos ejemplos de casos en Iberoamérica que lo estarían desarrollando.