Rwanda : para deconstruir un genocidio "evitable"
Leach, Pamela
Rwanda : para deconstruir un genocidio "evitable"
Se ha dicho mucho acerca del papel de la comunidad global durante el genocidio rwandés; la Organización de la Unidad Africana (actualmente la Unión Africana) ha sugerido que los actores internacionales pudieron haber prevenido el genocidio. Más allá de exponer cualquier perspectiva hobbesiana, el genocidio rwandés se revisa aquí como un profundamente moderno producto de elaboradas estructuras de control político y social. Esta sicología histórica argumenta que la patología del genocidio puede ser endémica de la "civilización" occidental y sus prácticas autodisciplinadoras. El artículo revela las profundamente históricas y reconocibles raíces europeas del genocidio. La brutalidad y los imperativos de mercado del sistema colonial erosionaron las estructuras sociales y fueron apropiadas como métodos políticos estratégicos. Esto redujo la complejidad política y las identidades étnicas a una jerarquía de clases crudamente racista. La frase "divide y conquistarás" adoptó un nuevo significado al desarticularse el patronazgo y los impuestos de las cadenas sociales, de esta manera, los temores, las deudas y la explotación fueron individuados. La "modernización" de la tenencia de la tierra concentró la propiedad en pocas manos, y forzó a la mayoría a una especie de servidumbre "no obligatoria". Paradójicamente, esta injusta imputación de la responsabilidad a los individuos contribuyó de manera significativa a su sublimación eventual mediante el colapso completo de la responsabilidad política.
Rwanda : para deconstruir un genocidio "evitable"
Se ha dicho mucho acerca del papel de la comunidad global durante el genocidio rwandés; la Organización de la Unidad Africana (actualmente la Unión Africana) ha sugerido que los actores internacionales pudieron haber prevenido el genocidio. Más allá de exponer cualquier perspectiva hobbesiana, el genocidio rwandés se revisa aquí como un profundamente moderno producto de elaboradas estructuras de control político y social. Esta sicología histórica argumenta que la patología del genocidio puede ser endémica de la "civilización" occidental y sus prácticas autodisciplinadoras. El artículo revela las profundamente históricas y reconocibles raíces europeas del genocidio. La brutalidad y los imperativos de mercado del sistema colonial erosionaron las estructuras sociales y fueron apropiadas como métodos políticos estratégicos. Esto redujo la complejidad política y las identidades étnicas a una jerarquía de clases crudamente racista. La frase "divide y conquistarás" adoptó un nuevo significado al desarticularse el patronazgo y los impuestos de las cadenas sociales, de esta manera, los temores, las deudas y la explotación fueron individuados. La "modernización" de la tenencia de la tierra concentró la propiedad en pocas manos, y forzó a la mayoría a una especie de servidumbre "no obligatoria". Paradójicamente, esta injusta imputación de la responsabilidad a los individuos contribuyó de manera significativa a su sublimación eventual mediante el colapso completo de la responsabilidad política.