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100 1 _aCruz, Juan Carlos
245 1 4 _aLas calles de Culiacán, el otro panteón
520 _aDoña Rafaela Rocha halló el cadáver de su hijo Isaías el dos de noviembre de 2008 a la orilla del camino que va a Mojolo, detrás del fraccionamiento Las Cumbres, en Culiacán. Ni sus ruegos, ni las marchas de familiares y amigos pudieron frenar la ejecución de Isaías Marco Antonio Rodríguez Rocha, estudiante de sistemas computacionales de la Universidad de Occidente, quien fue secuestrado el dieciséis de octubre de ese mismo año, cuando se encontraba con unos amigos sobre el bulevar Rotarismo. La familia Rodríguez Rocha había colgado en varios puentes de la ciudad mantas con mensajes que suplicaban a los secuestradores devolver sano y salvo a Isaías. Nada sirvió. Diecisiete días después lo mataron. Doña Rafaela levantó, entonces, un cenotafio en el lugar donde su hijo apareció muerto. Desde hace seis años lleva flores y veladoras. Isaías, vive ahí.
773 1 _tEmeequis. Periodismo indeleble
_g2, 334 (ago. 2014), 38-45
999 _c273063
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