Díaz, Gloria Leticia
La orden de “abatir” vino de muy arriba
Los militares que ejecutaron a veintidós personas en Tlatlaya en junio del año pasado, actuaron obedeciendo órdenes, mismas que reflejan una línea estratégica que viene de las más altas esferas. Un documento confidencial obtenido por el Centro Prodh revela que el Plan Estratégico de Combate contra el Narcotráfico se pliega a la percepción presidencial de que este delito es la mayor, amenaza a la seguridad nacional, y recomienda a la tropa, abatir delincuentes en horas de la oscuridad. Mientras las esferas militares intentan debatir sobre el significado del verbo, abatir, organizaciones nacionales e internacionales de derechos humanos exigen castigo a los responsables, pero desde el ámbito civil.