La tensión entre afán de desarrollo y fidelidad a los valores propios, la tensión desarrollo, ethos, ha de contarse entre las preocupaciones fundamentales de Leopoldo Zea. Sin embargo, lejos de haber recibido un único tipo de tratamiento en su dilatada obra, dicha tensión fue objeto de distintas resoluciones, cuya articulación no resulta sencilla. El propósito del ensayo es doble: de un lado, mostrar los principales modos a través de los cuales Zea procuró resolver la tensión aludida; del otro, delinear una serie de consideraciones acerca de la eventual obsolescencia, vigencia del legado zeiano, colosal, proteico, tensionado, multívoco, desde el punto de vista del anhelo de insuflar espesor y densidad a algunos de los debates que signan nuestro tiempo.