Puerta, Andrés

La posición política del periodismo, tomar parte por las víctimas

Medellín fue la ciudad más violenta de mundo. Entre 1995 y el 2013 hubo más de noventa mil homicidios, la cifra de muertos crecía cada año y se hizo más grave en 1991 cuando se registraron unos cuatro mil asesinatos, algo así como el accidente de veintisiete aviones Boeing setecientos treinta y siete. La situación de desesperanza y crueldad únicamente puede compararse con las vividas por las ciudades mexicanas de Ciudad Juárez y Tijuana. Un agravante es que la mayoría de los muertos eran menores de edad, que eran parte de un ejército de niños sicarios que vivían muy pocos años, a cambio de dinero y prestigio en sus barrios. Uno de los grandes problemas, que aún no se ha erradicado, fue enseñarles a esos niños que odian tomar un atajo para poder tener una moto, ropa, comprarle una casa a su mamá o conseguir la atención de la joven más bonita del barrio, en lugar de estudiar o un ascenso en un trabajo que les tomaría años.


EL ESPECTADOR, CARLOS MARIO, PERIODISMO