Ndhria, Nitin

La crisis de la globalidad es de liderazgo. "No dejen de aprovechar una buena crisis", aconseja el dean de Harvard Business School, en su disertación sobre el futuro de la globalización

Créanme, yo he pasado mucho tiempo reflexionando sobre la naturaleza cambiante de la globalización. Soy dean de una institución en la que cada generación de novecientos estudiantes de MBA que entran cada año normalmente incluye más de trescientos cincuenta estudiantes extranjeros que se trasladan a estados Unidos. Más de sesenta por ciento de los diez mil ejecutivos que formamos en nuestro campus cada año son internacionales. Más de cuarenta por ciento de las publicaciones de nuestra escuela de negocios ya se distribuyen a nivel internacional. ¿Qué va a significar la hostilidad actual hacia la globalización para nuestra escuela? ¿Qué va a significar para el IPADE? Para mí, ésta no es sólo una pregunta intelectual: es profundamente personal. Yo mismo soy alguien que hace más de treinta años tomó la decisión de emigrar a Estados Unidos. Yo nací y crecí en la India y fui a Estados Unidos para realizar estudios de posgrado. Obtuve la ciudadanía y he vivido en Estados Unidos desde entonces. Y soy muy afortunado de tener muchos, muchos amigos inmigrantes que también llegaron para estudiar. Así que, al reflexionar sobre este debate acerca de la globalización, yo instaría a todos los que estamos en esta sala a recordar que no se trata tan sólo de una cuestión de economía. También es una cuestión de liderazgo. Un liderazgo eficaz requiere generosidad, empatía, una postura que trascienda una mentalidad transaccional de ojo por ojo y de suma cero. El liderazgo requiere pensar en los demás, da prioridad a la creación de valor, en lugar de la reivindicación de valor…