Tapia, Palmira, y, et. al. <br/><br/>
Los datos cuadran 

<br/><br/> El pasado cuatro de junio se llevó a cabo la elección por la gubernatura en el estado de México, un proceso que generó gran expectativa en el entorno político. Es innegable que el estado de México resulta determinante para la correlación de fuerzas políticas que pretenden ejercer el poder público en nuestro país, ya que en esta entidad federativa emiten su voto más de once millones de electores. Al igual que en las elecciones de Estados Unidos, el proceso en el estado de México estuvo plagado de fake news y posverdades, principalmente en la jornada electoral. El cuatro de junio se observó a los candidatos proclamándose ganadores de la elección, a pesar de no contar con resultados oficiales y basándose únicamente en los resultados de muy pocas casillas reflejados en el Programa de Resultados Electorales Preliminares, PREP. Por otra parte, en redes sociales circularon videos mostrando anomalías en el conteo de las boletas en las casillas y supuestas inconsistencias en la suma de los votos en el PREP…