Mendiburo, Diego

Alison Jackson, El arte del engaño

Nos fascina ser mirones, violar la intimidad de los otros. Ese poder nos excita, más si se trata de gente famosa. Ser capaces de entrar a sus encinas. A sus casas y hasta a los cuartos de baño de esas figuras de la farándula a quienes probablemente jamás conoceremos en persona. Comprobar que son tan humanos como nosotros. La era de la información nos ha convertido en dioses: en todo lugar estamos y todo lo vemos. Es la suerte de vivir en un mundo construido con imágenes. Pero, de golpe, descubrimos que ha sido un engaño. Que la cámara miente y el ojo ha caído, una vez más, en la trampa. Y aun sabiendo que todo es falso, no podemos dejar de ver. Las fotografías nos seducen. Ese es el poder que domina la artista británica Alisan Jackson: el de convertir el engaño en arte.