Reforma en materia de información nutrimental
En general, el consumidor espera obtener satisfacción al adquirir un producto. En el caso de los comestibles, se establece un pacto de confianza con la información que el fabricante ofrece, o bien, no se le da la suficiente importancia. Pero ¿son confiables los productores de alimentos y bebidas? ¿Se deben asumir como verdad las cualidades nutricionales que presumen los productos? El consumidor se ha vuelto más consciente al momento de comprar un alimento o bebida. Dos de cada diez tienen el hábito de consultar las etiquetas. Lo impreso en las etiquetas puede estar muy alejado de la realidad. La Revista del Consumidor analizó cuarenta y cuatro marcas de jugos, setenta por ciento sustituía parte de la fruta por azúcares.