Leos <br/><br/>
El playback y sus dilemas 

<br/><br/> No sé si vieron el Super Bowl. Tal vez escucharon sobre el show de medio tiempo. Desde hace años, el acto musical entre el segundo y el tercer cuarto del partido es casi tan importante como el juego en sí. Si tampoco se enteraron, les cuento: Bruno Mars, célebre estrella pop, se vistió de dorado, se hizo un fleco a la Pedrito Fernández y cantó sus éxitos. Equis. Lo que se puso bueno fue que, casi al final de su show, aparecieron en el escenario los Red Hot Chili Peppers y cantaron Give it away junto con él. El detallito fue que lo hicieron con los instrumentos desconectados… Escándalo, La gente reaccionó fatal en las redes sociales, al grado de que Flea, el bajista de los Peppers tuvo que emitir un comunicado de prensa explicando por qué su banda hizo lo que, para el público, resulta el peor pecado de una presentación:  Playback. Flea aseguró que Anthony Kiedis, el vocalista, sí cantó en vivo pero sobre una pista instrumental a petición de la NFL. Es comprensible: en un evento así de grande y con tantos televidentes, ciento once punto cinco millones, ahí nomás, los organizadores no pueden permitirse fallos. El tiempo que tienen para armar el escenario es mínimo como para arriesgarse a que algún instrumento suene mal.