Cantú, Jesús

Promiscuidad electoral

Para la elección del siete de julio, lo que elegantemente se ha llamado, pragmatismo, de los partidos políticos nacionales y estatales desembocó en una orgía de coaliciones sin congruencia ideológica ni programática. Sin preguntarse ni el nombre, las dirigencias concertaron alianzas con sus adversarios históricos, con los nuevos protagonistas y hasta con sus aliados de siempre, ya sea por separado o revueltos en un coctel que impidió a los votantes razonar su voto.