Foncillas, Adrián

Purga en Beijing

Antes de su debacle, Bo Xilai era un político en permanente ascenso: alcalde de Chongqing, encabezaba una facción dentro del Partido Comunista que criticaba las desigualdades sociales provocadas por la apertura capitalista. Mediante un estilo populista recurría al maoísmo para ganarse a las masas. Estaba listo para formar parte del Comité Permanente del partido. Pero todo cambió de golpe: su principal colaborador pidió asilo en el consulado de Estados Unidos y lo vinculó con actos de corrupción y con la muerte del empresario británico Neil Heywood. Ello provocó un escándalo político a seis meses de que se efectúe la renovación en la cúpula del poder en China.