Alonso Meneses, Guillermo

Tijuana, las esquinas del sexo, los rincones del placer

Los contrastes socioculturales que encierra, la constante decantación de sedimentos culturales o destilaciones sociales, costumbres e interacciones, unido a la historia de la Avenida Revolución, hacen de las calles descarriadas de la Tijuana mítica el espacio de las tentaciones y transgresiones. Por supuesto, para muchos otros resulta todo lo contrario. Por paradójico que parezca, éstas y otras sensaciones parecidas sólo se sienten en aquellas calles en donde la promesa de diversión y placeres sexuales están anunciados a los cuatro vientos. Es en las esquinas y rincones de la Revolución y la Coahuila, en donde el bullicio de los visitantes condensa una efervescencia festiva. Estas circunstancias propician una atmósfera urbana, bien característica, de ciertos lugares y horarios de la ciudad de Tijuana, que podrían reflejar cierta flexibilidad o tolerancia "moral" pero, también, cierta insensibilidad o indiferencia.