Greenpeace México
Lucha global por la comida: la falacia del fin del hambre
Entre la energía nuclear y los transgénicos cuando el presidente estadounidense David Eisenhower comenzó a promover la energía nuclear con el programa Átomos para la Paz, ofrecía una energía extremadamente barata y limpia; se decía entonces que sería más caro cobrarla que producirla, que los automóviles y los aviones serían movidos por esta energía… era la falacia del fin del abasto energético. Las advertencias sobre la posibilidad de un accidente nuclear grave y sus consecuencias, sobre el impulso que se daría a la proliferación del armamento nuclear permitiendo a diversos gobiernos poseer reactores nucleares y sobre la imposibilidad de dar solución a la generación de desechos radiactivos, con vidas medias de decenas de miles de años, fueron desoídas. Cada uno de los hechos advertidos han ocurrido: los accidentes nucleares, Chernobyl, Isla de Tres Millas, Windscale, la proliferación de armamento a través de la compra de tecnología nuclear con, fines pacíficos, India, Pakistán, Israel, y el problema generado por la acumulación de enormes cantidades de desechos radiactivos de alto nivel sin destino seguro.