Maillard, Tatiana

“He pasado por rachas en que nada me conmueve”. Iraida Noriega

Ella posee dos voces: la que canta con potencia, dulzura o desgarro, según los impulsos que marcan la rotunda libertad jazzística; y la que usa para hablar con ese tono grave que le imprime fuerza a cada palabra que suelta. No me late estar cuarenta minutos hablando de mí y de lo que pienso.¿Para qué?. Lo que a ella le interesa es hablar de música es hablar de música, la que fluye en sus venas, la que heredó de su padre, el músico Fredy Noriega, y la que diluye los efectos de la, morfina en el corazón…