¿Qué tanto conoces y qué tanto confías en tus candidatos?
Ya no se vale votara la lígera ni otorgar cheques en blanco a los candidatos. Lo mismo si quieren la Presidencia de la República que sí buscan ser senadores, alcaldes o diputados… El carisma o la simpatía se desvanecen más pronto de lo que pensamos. Y aunque ya estés muy seguro de a quien le darás tu voto, no está de más que te detengas y le des una segunda pensanda. ¿Qué tanto los conoces, que tanto confías en ellos? Hazte estas preguntas antes de que los ayudes a llegar a Los Pinos y al Congreso. Se trata de evitar que el desencanto y la decepción nos apabullen luego.