Carballo, Mardonio

… Y nosotros seguimos teniendo la palabra. Las plumas de la serpiente

La noticia llegó con el aire que se metía entre las frondas de los árboles haciéndoles cantar…Así entre las felicitaciones trasnochadas, tlayudas y garnachas, junto a la vendedora de rosas y de bupu, llegó la increible noticia: Carmen Aristegui escribía, vía mensaje celular, desde el otro lado del mundo, culturalmente hablando, desde la Ciudad de México: Por incompatibilidad editorial la empresa decidió no renovar mi contrato y mañana es mi último programa en la W.