Gasparini, Juan

Los legendarios viajes de Borges a Ginebra

La conjunción de fotos y, textos de Borges que ofrece actualmente la Universidad de Ginebra, lo recuerda como un personaje' devoto de esta ciudad, a la que volvía permanentemente. Allí falleció hace casi veintitrés años, y encontró su tumba. Una calle ostenta las señas de identidad del autor y el manuscrito de El sur, acaso mi mejor cuento, se expone en uno de los museos de la conocida urbe a orillas del lago Leman... Es fácil adivinar que el apego de Borges por Ginebra abreva en la literatura. Arribó siguiendo a su padre, quien buscaba sanarse de una ceguera hereditaria que el joven incubaba sin saberlo. Entre abril de 1914 y junio de 1918, vivió en una pensión al borde de la vieille ville, villa vieja, bloqueado a raíz de la Primera Guerra Mundial.