Gazol Sánchez, Antonio

Tres instituciones sin rumbo

No es novedad afirmar que a partir de 1983 la política económica de México comenzó un cambio cuyos resultados, en el mejor de los casos, siguen siendo inciertos. La antigua política sustitutiva de importaciones y, por lo mismo, proteccionista y con fuerte presencia del Estado fue reemplazada por una política de apertura y de apuesta por las exportaciones como generadora del crecimiento. En otras mesas se han analizado los alcances y los efectos de ese giro; lo que aquí toca comentar es el marco institucional internacional en el que México lo ha realizado… Si bien fue una estrategia planeada, en el sentido de que fue concebida e instrumentada con el propósito de abrir y competir, no de que hubiere respondido a un plan coherente, estructurado y con metas de mediano y largo plazos, también es cierto que obedeció más a fenómenos circunstanciales de corto alcance que a un esquema concebido en el marco de un proyecto de mayor visión, por lo que no es posible conocer, sin especular en exceso, si se contemplaron los cambios que estaban empezando a Restarse en la esfera internacional y en sus instituciones de mayor influencia, y que, en buena medida, han sido determinantes en el derrotero que ha tomado la nueva forma de inserción de México en la economía internacional.