Damm Arnal, Arturo

De la división de poderes y el gasto del poder Ejecutivo

La división de poderes tiene como fin evitar que un poder, el del gobierno, que en ciertas circunstancias puede ser arbitrario, en el mejor de los casos, y peligroso, en el peor, se deposite en una sola mano, de tal manera que uno sea el poder Ejecutivo, otro el Legislativo, y otro más el Judicial. Se trata, separando las funciones del gobierno en los tres poderes que lo integran, de dividir una fuerza que, indivisa, puede terminar negando aquello que debe afirmar: los derechos de la persona, derechos que el Estado, sus leyes, sus instituciones y sus gobiernos deben reconocer plenamente, definir puntualmente y garantizar jurídicamente, derechos a la vida, la libertad y la propiedad.