Martínez Cázares, Germán

¿Herejes contra Poniatowska? / Germán Martínez Cázares

No se asusten apreciables seguidores de la obra de doña Elena Poniatowska. No monten en cólera. Tranquilos todos. Este artículo no va dirigido a quienes acaban de disfrutar su pluma, con la aventura de dignidad de Trinidad Pineda en El tren pasa primero. Tampoco tiene como destinatarios a los que se maravillaron con Lorenzo de Tena, en su lucha por alcanzar las estrellas en La piel del cielo. No pretende cuestionar -faltaba más- el testimonio de cariño y dolor que Poniatowska deja por la Ciudad de México en Nada, nadie: las voces del temblor. !De dónde o con qué autoridad cuestionar el homenaje a Tina Modotti? No. No. La escritura de embrujo de Elena Poniatowska es arte y cultura. Es orgullo de nuestras letras y gozo de los que saben leer. Me parece miope cuestionarla sin conocer sus novelas, sus crónicas o su estilo literario. Sin embargo, lo que me parece francamente repugnante es que muchos de sus ahora defensores políticos no se hayan percatado de que muchos mexicanos podemos, al mismo tiempo, disfrutar de la prosa de Elena Poniatowska y no estar de acuerdo con sus juicio favorables sobre el gobierno reciente del Distrito Federal. !Es herejía criticar las opiniones políticas de Elena Poniatowska?