Aun cuando faltan ocho meses para que arranque la Copa del Mundo de Alemania 2006, la guerra entre Televisa y TV Azteca por el rating se ha recrudecido. Con las señales saturadas por el negocio publicitario, ambos consorcios recurren a los golpes bajos para quedarse con la mayor parte de las ganancias. Y en lucha todo vale: insultos, amenazas, golpes, acuerdos incumplidos y pirateo de estrategias publicitarias.