Hubard, Julio <br/><br/>
Estado de excepción 

<br/><br/> Uno de los fenómenos que miss inquietan y malhumoran a ciertos sectores políticos es la ambigua y creciente importancia de las ONGs en la zona del conflicto chiapaneco y, en general, por sobre todas las áreas en que se ven involucrados los derechos humanos. En efecto, es cierto que las organizaciones de la sociedad civil suelen actuar de modo equívoco e impiden muchas veces el eficaz funcionamiento de los malos medios para los supuestamente buenos fines que persiguen las instituciones del régimen. Sin embargo, también es cierto que las instituciones estatales, en una etapa de gran fragilidad política, tienen como objetivo inmediato no la mejoría de la sociedad sino su propia conservación del poder, justo ahí donde se ven cuestionadas por las organizaciones civiles. Desde aquí se están jugando un par de contradicciones que no tienen visos de solucionarse pronto.