La otra “solución final”
Summary: Cuando la caída de Hitler era un hecho, la población alemana se encontró en una situación que no había previsto: la derrota. Era un escenario impensable. Y más: la amenaza de la venganza soviética se aproximaba a pasos agigantados. Para muchos esos dos factores eran insoportables. De ahí que ocurriera lo que se denominó entonces, epidemia, de suicidios: siete mil cincuenta y siete en toda Alemania en la primavera de 1945, según cifras oficiales. Decenas de miles, según recuentos de algunos historiadores. La pequeña ciudad de Demmin, con sus mil suicidas en cinco días, fue el ejemplo más trágico de esa, epidemia.Item type | Current library | Collection | Call number | Materials specified | Status | Date due | Barcode |
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Analítica | Biblioteca Legislativa | Hemeroteca | Available | 468677 |
Cuando la caída de Hitler era un hecho, la población alemana se encontró en una situación que no había previsto: la derrota. Era un escenario impensable. Y más: la amenaza de la venganza soviética se aproximaba a pasos agigantados. Para muchos esos dos factores eran insoportables. De ahí que ocurriera lo que se denominó entonces, epidemia, de suicidios: siete mil cincuenta y siete en toda Alemania en la primavera de 1945, según cifras oficiales. Decenas de miles, según recuentos de algunos historiadores. La pequeña ciudad de Demmin, con sus mil suicidas en cinco días, fue el ejemplo más trágico de esa, epidemia.
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