Y la capital, sin estadio de béisbol

Los Diablos Rojos del México aseguraron el pasado jueves treinta y uno su pase a los playoffs de la temporada 2014 en la Liga Mexicana de Béisbol, LMB. La novena, propiedad del empresario Alfredo Harp Helú, accede a estas instancias por trigésima segunda ocasión de forma ininterrumpida. Esta vez lo logró cuando aún restaban catorce partidos por disputarse. Con todo, su clasificación no fue la noticia más importante que recibieron en la semana: deberán desalojar el estadio donde juegan. Con setenta y cuatro años de existencia, los Diablos Rojos pueden presumir de todo, menos de contar con escenario propio. Son el equipo profesional de béisbol con la mayor cantidad de aficionados en el país, el de mayor número de campeonatos en la LMB, quince, y el segundo con más temporadas disputadas en la liga, setenta y cuatro. Sin embargo, esto no ha bastado para poner fin a su eterna condición de invitado incómodo.