Maestro Bulnes
Summary: La noticia de la muerte de José María Bulnes Aldunate es devastadora para todos los que lo conocimos. Su inteligencia y sus conocimientos eran enormes, resultados de años de estudio en derecho, filosofía y lenguas clásicas. Aunque nada le era más ajeno que la ostentación, su saber se hacía patente desde el primer momento en que uno lo escuchaba... Tuve la inmensa fortuna de ser alumno suyo a partir de 1975, cuando me inscribí al curso que impartía sobre Filosofía de la Historia en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Después lo seguí en otros cursos, todos brillantes, apasionantes siempre... Como muchos de sus compatriotas, llegó a México a raíz del golpe militar contra el gobierno de Salvador Allende. Contaba ya con amigos y conocidos en nuestro país. Entre ellos Ivan Illich, a quien supongo que habrá conocido en Puerto Rico a comienzos de los años sesenta, cuando Illich era vicerrector de la Universidad Católica en aquel país, y Bulnes, profesor en la Universidad de Río Piedras, comenzaba a destacar en su larga labor como catedrático universitario. Hacia 1982 tuve el inesperado gusto de conversar con Edgardo Rodríguez Juliá, el notable novelista portorriqueño, quien también, lo descubrimos por azar mientras hablábamos, había sido alumno de Bulnes. No tuvo sino palabras de admiración y entusiasmo hacia él.Item type | Current library | Collection | Call number | Materials specified | Status | Date due | Barcode |
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Analítica | Biblioteca Legislativa | Hemeroteca | Available | 438877 |
La noticia de la muerte de José María Bulnes Aldunate es devastadora para todos los que lo conocimos. Su inteligencia y sus conocimientos eran enormes, resultados de años de estudio en derecho, filosofía y lenguas clásicas. Aunque nada le era más ajeno que la ostentación, su saber se hacía patente desde el primer momento en que uno lo escuchaba... Tuve la inmensa fortuna de ser alumno suyo a partir de 1975, cuando me inscribí al curso que impartía sobre Filosofía de la Historia en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Después lo seguí en otros cursos, todos brillantes, apasionantes siempre... Como muchos de sus compatriotas, llegó a México a raíz del golpe militar contra el gobierno de Salvador Allende. Contaba ya con amigos y conocidos en nuestro país. Entre ellos Ivan Illich, a quien supongo que habrá conocido en Puerto Rico a comienzos de los años sesenta, cuando Illich era vicerrector de la Universidad Católica en aquel país, y Bulnes, profesor en la Universidad de Río Piedras, comenzaba a destacar en su larga labor como catedrático universitario. Hacia 1982 tuve el inesperado gusto de conversar con Edgardo Rodríguez Juliá, el notable novelista portorriqueño, quien también, lo descubrimos por azar mientras hablábamos, había sido alumno de Bulnes. No tuvo sino palabras de admiración y entusiasmo hacia él.
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