Un cristianismo sin religión
Summary: La crisis que viven la Iglesia y el mundo nos coloca a los cristianos de cara a un problema que Dietrich Bonhoeffer, el teólogo luterano encarcelado y ejecutado durante el nazismo por su participación en el complot que intentó asesinar a Hitler planteó en las cartas que desde la prisión de Tegel escribió a su amigo y discípulo Eberhard Bethege1; es necesario un cristianismo sin religión. La afirmación no es una mera ocurrencia; es el resultado de mirar la experiencia de la fe más allá o más acá del marco religioso en el que hasta ahora ha vivido. Expliquémoslo… Hasta recientes fechas, la Iglesia, a lo largo de su existencia como institución, ha intentado salvaguardar una interpretación del cristianismo desde una perspectiva religiosa: como moral y poder de la presencia de Dios. Sin embargo, la mayoría de los seres humanos que, para decido con Bonhoeffer, han llegado a su mayoría de edad, es decir, a ya no necesitar, a causa de sus desarrollos tecnológicos y de la independencia de la moral del marco religioso, de la hipótesis de Dios para vivir y estar en el mundo, la miran desde hace tiempo, quizás desde la Ilustración, como una realidad obsoleta.Item type | Current library | Collection | Call number | Materials specified | Status | Date due | Barcode |
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Analítica | Biblioteca Legislativa | Hemeroteca | Available | 378470 |
La crisis que viven la Iglesia y el mundo nos coloca a los cristianos de cara a un problema que Dietrich Bonhoeffer, el teólogo luterano encarcelado y ejecutado durante el nazismo por su participación en el complot que intentó asesinar a Hitler planteó en las cartas que desde la prisión de Tegel escribió a su amigo y discípulo Eberhard Bethege1; es necesario un cristianismo sin religión. La afirmación no es una mera ocurrencia; es el resultado de mirar la experiencia de la fe más allá o más acá del marco religioso en el que hasta ahora ha vivido. Expliquémoslo… Hasta recientes fechas, la Iglesia, a lo largo de su existencia como institución, ha intentado salvaguardar una interpretación del cristianismo desde una perspectiva religiosa: como moral y poder de la presencia de Dios. Sin embargo, la mayoría de los seres humanos que, para decido con Bonhoeffer, han llegado a su mayoría de edad, es decir, a ya no necesitar, a causa de sus desarrollos tecnológicos y de la independencia de la moral del marco religioso, de la hipótesis de Dios para vivir y estar en el mundo, la miran desde hace tiempo, quizás desde la Ilustración, como una realidad obsoleta.
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