Para una teoría sociológica posmoderna. traducción: Maya Aguiluz I.

Las ideas sostenidas en este ensayo deben su inspiración a numerosos debates y lecturas por las que manifiesto una deuda intelectual. De entrada, propongo algunas distinciones terminológicas que se irán hilvanando en los apartados subsiguientes. El término posmodernidad representa con precisión aquellos rasgos distintivos de la condición social que emergió a través de los países ricos de Europa y sus naciones descendientes en el curso del siglo Veinte y tomó su forma actual durante la segunda mitad de ese siglo. El término es preciso cuando refiere la continuidad y discontinuidad como las dos caras de la relación intrincada entre esa condición social actual y la formación social precedente. Acusa el lazo genético e íntimo que une esta condición social con la modernidad, formación social que surgió en esa misma parte del inundo a lo largo del siglo Dieciocho y adquirió su forma final, sedimentada más tarde en los modelos sociológicos de la sociedad moderna, o lo que es lo mismo, en los modelos de sociedad creados por la sociología moderna, durante el siglo Diecinueve; al mismo tiempo indica el tránsito de ciertas características cruciales, en cuya ausencia ya no se puede calificar netamente esta condición social como moderna, en el sentido que le otorgó la teoría social ortodoxa, y moderna.