Los viajeros que se quedaron : extranjeros en la Revolución china

Durante el siglo XX, el triunfo de la Revolución rusa marcó el inicio de la lucha de las ideologías más radicales de nuestro tiempo: el fascismo y el comunismo. La guerra civil española fue el campo de batalla de prueba para la guerra contra el fascismo, y atrajo a hombres y mujeres que participaron en la lucha con un verdadero espíritu internacionalista. Casi al mismo tiempo, una revolución comenzó en China, y abrió otro frente antifascista que también atrajo partidarios de otros países. Este ensayo es un relato de las vidas de tres hombres que llegaron a China para participar en la Revolución, que se quedaron y convirtieron a este país en su casa. Estos tres hombres son: David Crook, Israel Epstein y Sidney Shapiro. Ellos llegaron a China desde distintos lugares e inicialmente por diferentes razones, y se quedaron hasta el fin de sus vidas porque se convencieron de que estaban presenciando un importante proceso, del cual quisieron formar parte. Aunque fueron atrapados por la turbulencia de la historia reciente de China y no pudieron evitar la persecución y el sufrimiento, y a pesar de los momentos en los que pudieron percibir la contradicción entre los valores que heredaron y los que asumieron después, a la larga nunca se arrepintieron de su decisión.