Pos qué le hacemos
Summary: Con un índice de desarrollo menor que el de países africanos como Uganda, Tanzania y Costa de Marfil, la población veracruzana de Mixtla de Altamirano existe de milagro. Entre su gente, más de ocho mil indígenas nahuas, la desnutrición y la muerte son cosa de todos los días, al punto de ubicarlos en el segundo lugar del país en mortalidad infantil. Cuando bien les va, como jornaleros reciben veinticinco pesos diarios para alimentar a sus numerosas familias... ¿Pos qué le hacemos?... ¡Así vivimos!, dice resignado el indígena Cenobio Tlaxcaltenco.Item type | Current library | Collection | Call number | Materials specified | Status | Date due | Barcode |
---|---|---|---|---|---|---|---|
Revistas | Biblioteca Legislativa | Hemeroteca | Available | 309855 |
Con un índice de desarrollo menor que el de países africanos como Uganda, Tanzania y Costa de Marfil, la población veracruzana de Mixtla de Altamirano existe de milagro. Entre su gente, más de ocho mil indígenas nahuas, la desnutrición y la muerte son cosa de todos los días, al punto de ubicarlos en el segundo lugar del país en mortalidad infantil. Cuando bien les va, como jornaleros reciben veinticinco pesos diarios para alimentar a sus numerosas familias... ¿Pos qué le hacemos?... ¡Así vivimos!, dice resignado el indígena Cenobio Tlaxcaltenco.
There are no comments on this title.