Conservar para cambiar : Juventino Castro
Material type: Article In: El mundo del abogado 5, 43 (nov. 2002), 13-17Summary: Juventino Víctor Castro siempre quiso ser Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Por eso, cuando cumplió 65 años -la edad límite que señalaba nuestra Carta Magna para serlo-, se sintió desconsolado. A pesar de su larga trayectoria en el mundo del Derecho, de sus celebrados libros y de las incontables voces que se habían alzado para interceder por él, todo parecía indicar que no llegaría a realizar su anhelo. A finales de 1994, sin embargo, con la reforma constitucional renacieron sus esperanzas. "Para que Juventino se convirtieron en ministerio", bromeaba más tarde Mariano Azuela, "tuvieron que reformar la Constitución, jubilar a 21 ministros y provocar un cisma en el Senado". Y, ahora, ya como ministro, Don Juventino sigue provocando reformas, jubilados y cismas. A él, esto parece divertirle enormemente.Juventino Víctor Castro siempre quiso ser Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Por eso, cuando cumplió 65 años -la edad límite que señalaba nuestra Carta Magna para serlo-, se sintió desconsolado. A pesar de su larga trayectoria en el mundo del Derecho, de sus celebrados libros y de las incontables voces que se habían alzado para interceder por él, todo parecía indicar que no llegaría a realizar su anhelo. A finales de 1994, sin embargo, con la reforma constitucional renacieron sus esperanzas. "Para que Juventino se convirtieron en ministerio", bromeaba más tarde Mariano Azuela, "tuvieron que reformar la Constitución, jubilar a 21 ministros y provocar un cisma en el Senado". Y, ahora, ya como ministro, Don Juventino sigue provocando reformas, jubilados y cismas. A él, esto parece divertirle enormemente.
There are no comments on this title.