Pleonocracia: Crítica de la democracia mayoritaria
Bovero, Michelangelo
Pleonocracia: Crítica de la democracia mayoritaria
Hablare de una cosa bastante complicada bajo este título, pleonocracia. Los amigos saben que de vez en cuando invento palabras, pleonocracia no existe, como no existía caquistocracia, ni otra que viene siendo mía, duopoliteia, que quiere decir la republica de los siervos contentos. Les hablare de la crítica de la democracia mayoritaria, que es un objeto muy extraño, de rara invención, casi toda italiana. Mi maestro Norberto Bobbio decía a todo el mundo, Italia es un gran laboratorio político. Hace algunos años, justamente aquí me permití agregar, Es un gran laboratorio político que se parece al laboratorio de Frankenstein, produce monstruos, y como la política en todo el mundo produce monstruos, quizás algo de lo que voy a decir pueda servir también de este lado del océano. Sin más, no desde ayer sino de mucho tiempo, sostengo la tesis de que los regímenes actualmente predominantes en el mundo occidental, a los cuales tomamos por templos y clasificamos bajo el tipo de la democracia, han padecido un proceso de mutación que los hace deslizarse hacia el tipo de la autocracia.
Pleonocracia: Crítica de la democracia mayoritaria
Hablare de una cosa bastante complicada bajo este título, pleonocracia. Los amigos saben que de vez en cuando invento palabras, pleonocracia no existe, como no existía caquistocracia, ni otra que viene siendo mía, duopoliteia, que quiere decir la republica de los siervos contentos. Les hablare de la crítica de la democracia mayoritaria, que es un objeto muy extraño, de rara invención, casi toda italiana. Mi maestro Norberto Bobbio decía a todo el mundo, Italia es un gran laboratorio político. Hace algunos años, justamente aquí me permití agregar, Es un gran laboratorio político que se parece al laboratorio de Frankenstein, produce monstruos, y como la política en todo el mundo produce monstruos, quizás algo de lo que voy a decir pueda servir también de este lado del océano. Sin más, no desde ayer sino de mucho tiempo, sostengo la tesis de que los regímenes actualmente predominantes en el mundo occidental, a los cuales tomamos por templos y clasificamos bajo el tipo de la democracia, han padecido un proceso de mutación que los hace deslizarse hacia el tipo de la autocracia.