Golfitaxiando en la ciudad
Maillard, Tatiana
Golfitaxiando en la ciudad
En la ciudad de México suceden cosas extrañas. Nuestra ubicación geográfica nos aleja de las costas, pero eso no impide que tengamos playas. Y los carritos que usualmente aplastan el pasto de los campos de golf fungen como taxis en la delegación Tláhuac. En tiempos donde el cambio climático obliga a voltear los ojos hacia medios de transporte movidos a través de la electricidad, al sur de la ciudad se opta por vehículos eléctricos, sí. Pero diseñados para andar en el pasto y no por las avenidas. Son automóviles que no usan gasolina... ni espejos retrovisores ni permisos otorgados por la delegación. No son taxis. Son los golfitaxis.
Golfitaxiando en la ciudad
En la ciudad de México suceden cosas extrañas. Nuestra ubicación geográfica nos aleja de las costas, pero eso no impide que tengamos playas. Y los carritos que usualmente aplastan el pasto de los campos de golf fungen como taxis en la delegación Tláhuac. En tiempos donde el cambio climático obliga a voltear los ojos hacia medios de transporte movidos a través de la electricidad, al sur de la ciudad se opta por vehículos eléctricos, sí. Pero diseñados para andar en el pasto y no por las avenidas. Son automóviles que no usan gasolina... ni espejos retrovisores ni permisos otorgados por la delegación. No son taxis. Son los golfitaxis.