Primer mito sobre el debate petrolero
Trejo Delarbre, Raúl
Primer mito sobre el debate petrolero
Ahora resulta, según algunos, que gracias a la ocupación del Congreso por parte del PRD y sus aliados tenemos debate acerca de la reforma energética. Abierta aún la herida que ellos mismos se infligieron en el ánimo de la sociedad, los dirigentes del Frente Amplio Progresista y varios de sus propagandistas quieren propalar la versión de que sin toma del Congreso no habríamos tenido deliberación pública sobre el petróleo. Pero no es cierto. El asalto a los salones de sesiones en San Lázaro y Xicoténcatl, que entorpeció aunque no paralizó el trabajo de las cámaras de Diputados y de Senadores, sirvió para postergar la discusión y las decisiones acerca de la reforma petrolera. De ninguna manera propició el debate que finalmente comenzó el martes trece de mayo y seguirá, en dos y hasta tres sesiones semanales, hasta fines de julio.
Primer mito sobre el debate petrolero
Ahora resulta, según algunos, que gracias a la ocupación del Congreso por parte del PRD y sus aliados tenemos debate acerca de la reforma energética. Abierta aún la herida que ellos mismos se infligieron en el ánimo de la sociedad, los dirigentes del Frente Amplio Progresista y varios de sus propagandistas quieren propalar la versión de que sin toma del Congreso no habríamos tenido deliberación pública sobre el petróleo. Pero no es cierto. El asalto a los salones de sesiones en San Lázaro y Xicoténcatl, que entorpeció aunque no paralizó el trabajo de las cámaras de Diputados y de Senadores, sirvió para postergar la discusión y las decisiones acerca de la reforma petrolera. De ninguna manera propició el debate que finalmente comenzó el martes trece de mayo y seguirá, en dos y hasta tres sesiones semanales, hasta fines de julio.