Pequeñas maravillas
Gopnik, Alison
Pequeñas maravillas
La historia de la educación en el siglo Veinte muy bien podría resultar como la de la medicina en el siglo Diecinueve. Tanto la medicina como la educación tienen una intención moral. Transmitir lo que sabemos a nuestros hijos es, después de todo, una de las formas reales que tenemos de resistirnos a la muerte; la medicina sólo la pospone. Tanto la medicina como la educación invocan el conocimiento para legitimar su autoridad. Los doctores siempre están justificando sus prácticas con la idea de que ellos entienden cómo funciona nuestro cuerpo. Y los educadores siempre se justifican con la idea de que ellos comprenden cómo funciona la mente de los niños. Pero para muchos estas ideas están muy poco basadas en una investigación sistemática. En el mejor de los casos, son generalizaciones pragmáticas que se han originado durante el largo proceso de la práctica empírica… Durante los pasados ciento cincuenta años tuvimos que ir integrando gradualmente la verdadera ciencia biológica a nuestra práctica médica. Ésta ha sido una de las historias científicas de mayor éxito.
Pequeñas maravillas
La historia de la educación en el siglo Veinte muy bien podría resultar como la de la medicina en el siglo Diecinueve. Tanto la medicina como la educación tienen una intención moral. Transmitir lo que sabemos a nuestros hijos es, después de todo, una de las formas reales que tenemos de resistirnos a la muerte; la medicina sólo la pospone. Tanto la medicina como la educación invocan el conocimiento para legitimar su autoridad. Los doctores siempre están justificando sus prácticas con la idea de que ellos entienden cómo funciona nuestro cuerpo. Y los educadores siempre se justifican con la idea de que ellos comprenden cómo funciona la mente de los niños. Pero para muchos estas ideas están muy poco basadas en una investigación sistemática. En el mejor de los casos, son generalizaciones pragmáticas que se han originado durante el largo proceso de la práctica empírica… Durante los pasados ciento cincuenta años tuvimos que ir integrando gradualmente la verdadera ciencia biológica a nuestra práctica médica. Ésta ha sido una de las historias científicas de mayor éxito.